La poesía estuvo en todas partes

El día de nuestra poesía, la poesía salvadoreña, vigorosa y robusta, como se ha mantenido y se mantendrá, gracias a la fuerza incansable de los poetas y de la gente que sin serlo, ama la poesía.

Nora Méndez

Jorge, a quien no escuchaba desde hacía unos tres años, hizo una lectura emotiva de sus poemas más emblemáticos.

Cuando llegamos a La Luna, ya se encontraban allí Adriana, su novio, María Cristina Orantes y Aída Párraga. Habían llevado vejigas, listones, gallardetes de cuentas, cascarones y la noche empezaba a lucir prometedora. Luego llegó Sabi Reyes, con su mamá y su novio, toda gente muy hermosa y simpática. Sabi estaba un poco nerviosa, además de apurada porque tenía que regresar hasta su casa en Ilopango. Fueron llegando poco a poco más personas, así que cuando estuvieron alrededor de diez almas convocadas por la poesía dimos inicio a la noche poética.

La primera en leer sus textos fue Sabi Reyes, quien contó que empezó a escribir en la adolescencia y ésta era su primera vez en público y en un lugar tan diferente como La Luna.

Luego llamé a las brujas poderosas de Poesía y Más, que llegaron con un carnaval poético titulado "Detrás de la puerta está oscuro". María Cristina Orantes, Aída Párraga y Maura Echeverría, portaban antifaces y bailaban al ritmo de "la computadora", una famosa cumbia de ritmo vivaz. Así fueron entreteniendo al público, quien gozó con todas sus gracias: las actuaciones de Aída, la lírica de María Cristina y la voz y frases certeras de Maura Echeverría. Maura en especial, tuvo una presencia mágica y su voz retumbaba en aquel sitio.

La gente seguía incorporándose, hasta que fueron alrededor de cincuenta personas que disfrutaron escuchando poesía. Y es que nadie estaba allí para comer o de paso, todo el mundo estuvo atento a la palabras de los poetas, no hubo desperdicio alguno.

Luego llegó el turno de la magia de Tania Molina, que nos habló de la verdadera belleza femenina, no de la estereotipada, sino de la real, que asusta más de lo que se piensa. También nos habló de sus miedos en medio de la calle. Esa sensación de malestar que hemos empezado a sentir en las calles, donde tememos de tantos peligros, entre ellos de los automóviles si se es peatón y se intenta cruzar la calle.

Luego vino el turno de Xochilt Cabrera y de Nadie, dos jóvenes poetas que con sus versos dieron vida a los rostros de los poetas mayores.

Fue entonces el momento de llamar a los Señores de la Palabra y el Trueno, uno de los grupos literarios con más años de vida en la escena cultural: Piedra y Siglo o como Julio Iraheta Santos, los auto-rebautizó: Crack y Siglo. Estos poetas estremecieron a toda la audiencia, con su palabra desnuda, irreverente y tan poeta. Tres estilos distintos y tres hermanos: Ricardo Castrorrivas habló del amor y del dolor de la gente, Julio Iraheta Santos arremetió contra todas las instituciones posibles y Rafael Mendoza se lució con sus sonetos, que es donde alcanza su mejor voz poética.

Entonces, fue la hora de una chamana mayor, la poeta Silvia Matus, que cautivó a la audiencia con sus reflexiones agudas y su justa protesta. A ella le siguieron René Chacón y Jorge Avalos, que estremecieron a la audiencia con sus poemas. Jorge, a quien no escuchaba desde hacía unos tres años, hizo una lectura emotiva de sus poemas más emblemáticos y René, cautivó al público con sus metáforas sueltas y punzantes.

Los escuchas y los poetas ya no se eran ajenos, la gente estaba revuelta, todos éramos hijos de una noche sincera y plena.

Era hora de variar y apartando vejigas y listones proyectamos los multimedia y un Mario Noel Rodríguez vistiéndose frente a un espejo hizo su aparación, con poemas coloridos y una luz distinta a lo escuchado durante toda la noche. Y la poesía en la música tuvo su momento en el multimedia de Manuel Carcache, con los textos del Cantar de los Cantares.

La gente estuvo atenta y contenta. Todos llevaban su poemario en la mano y pedían más para regalar a amigos, hijos y parientes fuera de las fronteras. El poemario impreso, con amor y detalles, el mismo que ven arriba en sus pantallas, es un esfuerzo de nuestro amor, el de Manuel y el mío (que es un amor real con días alucinantes y otros días de conflictos), ese mismo amor que logró convocar a tanto poeta brillante la noche de ayer y a todos los que fueron convencidos a escucharles. El próximo lunes 26 saldrán 3000 poemarios más a caminar por las calles, buscando a la gente. Y como reza en la portada de éste mismo, termino:

Salvadoreño: éstos son tus poetas. Conócelos, quiérelos, leélos. Toma este poemario y llévalo a tu casa. Allí leelo con tu familia, amigos o vecinos. Hazlo en voz alta, como llamando a la esperanza.


Méndez, Nora. La poesía estuvo en todas partes, Las Puertas, 22 de marzo de 2007.

[Una crónica sobre la lectura de poesía en La Luna, Casa y Arte en el Día Internacional de la Poesía, 21 de marzo de 2007.]